Todo lo gratis es bueno

¿Es bueno? ¿Es gratis? En un ciclo presentado por el Gobierno de la Ciudad de Mauros Aires, se estuvieron prensentando bandas de relativo éxito en el Parque Roca. Las citas fueron los últimos dos fines de semana deenero, convocando bandas como Las Pelotas, Cielo Razzo, LosAuténticos Decadentes, Los Cafres y Las Pastillas del Abuelo. A estas se le sumaron otras de menor tirada de público, pero no por eso menos buenas.

Nuevamente nos reúne Las Pastillas del Abuelo, quienes el día sábado treinta y uno de enero dieron un show prolijo y sin fisuras. Tranquilo pero con espíritu de fiesta. Todo comenzó alrededor de las cinco de la tarde cuando empezó a caer el público pastillero para conseguir buenos lugares, o para escuchar a las bandas de la tercera del rock. Alrededor de las siete de la tarde, salió Piti Fernándezy su troup sensible de rock, dispuestos a regalar la fiesta a la que están acostumbrados sus invitados. Sacaron a pasear sus temas más conocidos y algunos de su nueva placa, "Crisis".

A pesar de haber sido un recital más que digno, los puntos altos pasaron por otro lado. El primero fue cuando el cantante de la banda salida de Almagro tomó un libro, y leyó quién era Julio Argentino Roca. Fueron pocas oraciones, pero las suficientes para plantar una semilla de duda a aquellos adolescentes que desconocen de los cimientos de la historia de este país. El segundo Pitimomento fue cuando el cantante, en la soledad del escenario, agradeció al gobierno por darle espacio a la cultura y a la música. Hubiera quedado chato y barrilete si no hubiera dicho lo posterior, en donde pidió viviendas dignas para los alrededores de Parque Roca. Ante los insultos del público a Mauri, el líder del Abuelo los calmó diciéndo"está bueno porque al menos nos dan espacio para la crítica constructiva". No hacen la revolución, no construyen casas para la gente ni le dan de comer. Pero es positivo que un grupo que tiene una buena cantidad de seguidores y oídos prestados, tenga un buen mensaje para dar y hacer pensar.

No es gratis porque lo pagamos todos. Pero es bueno.

Otra vuelta de tuerca

Cual fénix, frase echa y destrozada por miles de escritores, renacemos en las vías que dejamos por razones desconocidas.

Dos mil ocho musical, internacional. Los repasos quedaron en diciembre, llegué tarde.

Dos mil nueve prometedor. Los festivales se expanden y prometen. A veces cumplen. Deep Purple, Iron Maiden, Motorhead, Radiohead, Kiss, Keane y más, más y más. ¿AC/DC? ¿Soy insistente? El posteo del año pasado puede terminar como deseo de velita cumpleañera.

Las bandas nacionales siguen pegandose codazos para acomodarse en la escena. La multiplicidad de festivales destruye espíritus, pero brinda tablas. Esperamos el disco nuevo de Divididos, y los progresos de las populares Pastillas del Abuelo, Cielo Razzo y El Bordo.

¿Alguna sorpresa? Esperemos.

Como a los cincuenta y pico... una por mes.

Mamá, me afané un cd

¿Quién no copia? Desde el colegio que plagiamos. Todos, no se hagan los boludos. Es más fácil y económico copiar que hacer, o que comprar originales en este caso (en el sentido del dinero y también de las acciones).

Es imposible frenar las copias. Pueden enjuiciarnos a los que usamos el Ares, el Kazaa, el Napster. Pero vamos a salir de tribunales y al tercer puesto de cds o dvds callejeros (sin chistes, gracias) algo nos vamos a llevar. Porque donde termina el negocio de uno, empieza el de otros, y porque mientras exista el hombre y el dinero, siempre se va a poder comprar al poli de la esquina.

Señores artistas (arrrte), ¿no les rinde vender discos? Piensen, usen esa linda cabecita que sus padres les dieron además de para dejarse el pelo largo y sacudirlo al son de Rapsodia Bohemia, y traten de sacar algo interesante que haga que valga la pena comprar originales. Antes de las bajadas existieron las grabadoras de cd, antes los recitales y temas grabados en casetes, antes los colados en Almendra y así podemos seguir.

Toquen, hagan giras, preséntense más y en cualquier lugar, no todo es plata. Algunos tocan el Plaza Francia, investiguen. Y son mucho más grosos de lo que ustedes van a llegar a soñar alguna vez.

Una canción una vez que sonó por primera vez, es del público. Imaginemos un mundo musical con ideología alemana. Musica en las manos de todos, la producción en manos de todos. Al fin de cuentas, si tocás y tu canción gira y gira, más te van a ir a ver.

Volvió Cajitas Musicales, no se sabe ni por cuánto, ni por qué.